Un escalofrio me recorrió cuerpo, veia la cara de una persona sonriente y la otra con aspecto maligno. Les llamaría el bien y el mal, como la própia esencia del ser humano.
Esta misma sensación ya la habia experimentado en una ocasión en que me encontraba en Brasil cuando viajaba para comprar minerales para mi negocio, estando yo viviendo en Montaña la Data. En este momento de mi vida ya había adquirido algunos connocimiento sobre los benefícios terapeuticos de los minerales y me encontraba en Minas Gerais, en el almacen de un proveedor me acordé que deseaba comprar turmalinas negras, por que tenía la certeza que eran un mineral fundamental para la protección y el equilíbrio del individuo, pasado unos minutos le pregunto si tenía, y me señala un montículo en el suelo, entre las hierbas, una cantidad de unos 100 kilos de trozos irregulares de unos 200 gramos y bastante feos de turmalinas negra, me disponía a marchar cuando ellas me hicieron reaccionar y hacer que llegara a un acuerdo en el precio, para comprarlas.
Despues de un mes, cuando llegaron a mi almacen en Montaña La Data, estuvieron tiradas en un rincon hasta que, pasado bastantes meses, ellas me "volvieron hablar" recorriendome un escalofrío recorrió el cuerpo y me hizo fijarme en ellas. Al cabo del tiempo las puse a la venta y las usé así en trozos para curar dolores, curandome de una lumbalgia que padecía. Hoy todavía tengo una cierta cantidad de aquellas Turmalinas que compré hace ya 15 años, y me ayudaron a conocer sobre la energía sutil que emanan de todos los minerales.
Volviendo a la Aldea de San Nicolas, despues del encuentro, hallo a su lado, una otra piedra con el dibujo en altorrelieve de una cruz.
Al proporcionarle mi tio Antonio, todo el material fotografico que le llevo, relaciona el motivo floral que está en medio de las caras, con otra similar que aparece en unos altorrelieves que se saben pertenecer a la Orden del Temple en una construcción de Navarra. Entrevista publicada por el periódico La Provincia y la foto para comparar la similitud.
domingo, 22 de febrero de 2009
sábado, 21 de febrero de 2009
Juegan con tigo

Fijense en estas caras, alguna vez al mirarlas, parecen bajorrelieve, y cuando miras hacia otro lado y las vuelves a mirar, es un altorrelieve.
Para que ello ocurra, mirar fijamente a la piedra, ella se transformará en bajorrelieve, despues poco a poco volverá a ser lo que realmente es. Un altorrelieve
El nudo
Les he contado mis impresiones de los primeros días en Las Palmas, con el paso de los días fue cambiando y valorando el vivir en una pequeña ciudad, todo estaba cerca, el tráfico no era agobiante y yo disponía del coche de mi padre, aprendía sobre el negocio.
Las piedras que importaba de Brasil empezaban a seducirme.
Los estudios se encaminaban para acceder a la Universidad, primero estudié el Preu, en un instituto mixto de Chamman, donde conocí a la chica que años mas tarde, llegamos a casarnos. No puedo esconder que me fue muy difícil acceder a la Universidad, dado el retraso en el nivel de mi formación y conocer dos lenguas tan hermanas, que llegas a pensar que no conoces ni una ni la otra, dado que es correcto en una, cuando en la otra es un grave error. Me refiero al Portugués y el Castellano. Mi aprendizaje lo hice en Portugués y cuando llegué tuve que aprender el Castellano muy rápido, así me va.
Pero "Una Historia Real", no quiere pararse en estos detalles, sino fijarse en el camino que el destino, o unos "diosecillos" me tenían programado.
Después que en Rio de Janeiro, encontrara en un lugar nada habitual, una piedra de Amatista, que yo tallara una cara en madera y que un ave, el pato blanco, viniera hacia mi y estuviera hasta su muerte en mi jardín.
Primero la punta de Amatista, en aquel momento yo no sabía lo que era, en el jardín de mi casa en Aboliçao, Rio de Janeiro, lugar nada característico por tener cuarzos, encontré esa punta, en medio de la tierra que removía. Esa piedra la extravié en mi viaje de regreso a Las Palmas.
Pero "Una Historia Real", no quiere pararse en estos detalles, sino fijarse en el camino que el destino, o unos "diosecillos" me tenían programado.
Después que en Rio de Janeiro, encontrara en un lugar nada habitual, una piedra de Amatista, que yo tallara una cara en madera y que un ave, el pato blanco, viniera hacia mi y estuviera hasta su muerte en mi jardín.
Primero la punta de Amatista, en aquel momento yo no sabía lo que era, en el jardín de mi casa en Aboliçao, Rio de Janeiro, lugar nada característico por tener cuarzos, encontré esa punta, en medio de la tierra que removía. Esa piedra la extravié en mi viaje de regreso a Las Palmas.
La talla de una cara de Madera en la fábrica de zapatos de mi padre, fue otro hito que inició el camino hasta hallar las Caras de La Aldea.
Vuelvo a Las Palmas despues de 10 años fuera y me reencuentro con las piedras de Amatista.Mi padre las vendia para decoraración o a coleccionistas.
El tiempo pasa y yo estoy viviendo en el sur, en Montaña la Data, con mi própio almacen de Minerales para la venta y vuelve a ocurrir, un Pato blanco nos vuelve a visitar y se queda entre nosotros hasta que lo llevo a los alrededores de Palmitos Park y mas adelante mi tío Antonio me habla de una piedras talladas con dos caras y una representación floral, en la otra está tallada una cruz. Me hace interesarme por su busqueda y me facilita algunos datos, no muy concretos sobre su ubicación.
Antonio, me cuenta su teoria.

"-Estos son vestigios probatorios de que un grupo de la Orden del Temple, estuvieron en Gran Canaria, mas concretamente el la Aldea de San Nicolas". El cuento hecha raices en mi mente y me dispongo encontrar, para mi tio, las piedras talladas. El me enseña un recorte de periodico donde aparece la foto muy mala de las piedras y habla de una antigua casa de la Aldea, sin mas referencias. Despues de muchas visitas a la Aldea y hablar con muchos aldeanos, llego a un lugar, donde ya habia estado, pero a causa de un muro que habia sido reconstruido, no me habia fijado en una casa derruida que habia por detras.
Al verla, sentí que estaba en el camino cierto, se encontraba hacía muchos años en ruinas a causa de una herencia sin concluir, por estar ausente algunos de sus herederos. Me adentré en el terreno, mirando todas las piedras, habian muchas amontonadas y de gran tamaño, por lo que temia no poder encontrarlas puesto que podrian encontrarse debajo de grandes piedras que no podria mover.
Despues de varias horas de busqueda y de sacar fotos, me disponia marcharme cuando una piedra escondida entre la hierba, que habia pasado desapercibida todo el tiempo, me hiso mirarla, allí estaba, la cara sonriente y la otra al lado, maléfica.
Al verla, sentí que estaba en el camino cierto, se encontraba hacía muchos años en ruinas a causa de una herencia sin concluir, por estar ausente algunos de sus herederos. Me adentré en el terreno, mirando todas las piedras, habian muchas amontonadas y de gran tamaño, por lo que temia no poder encontrarlas puesto que podrian encontrarse debajo de grandes piedras que no podria mover.
Despues de varias horas de busqueda y de sacar fotos, me disponia marcharme cuando una piedra escondida entre la hierba, que habia pasado desapercibida todo el tiempo, me hiso mirarla, allí estaba, la cara sonriente y la otra al lado, maléfica.
La que contenia la cruz se encontraba a su lado.
viernes, 20 de febrero de 2009
La llegada a Las Palmas
Como ya conté, llegué a Las Palmas despues de un maravilloso viaje de vuelta en un Transatlantico el Amazon. Al septimo dia por la madrugada nos despertamos pronto porque se avistaban luces en el horizonte, era la Ciudad de las Palmas. Sobre las 7:00 horas atracamos. Alli estaban mis padres con mis hermanas Regina y Victoria con otras personas que no reconocia en un principio, eran mis tios y mis primos, Victor hermano de mi madre y su mujer Maria Teresa, con sus hijos Mavi, Chano, Marisol y Tere.
Al desembarcar y hacer el recorrido desde el muelle a la calle Triana, por todo Leon y Castillo, se me vino el mundo encima. Venia de una gran ciudad, que el los ultimos diez años de mi estancia allí, habia sido modernizada de manera brutal, con el Governador Lacerda, cuando Rio perdió la capitalidad de Brasil por su traslado a Brasili, su gobierno acometió un sinfin de obras de infraestructuras, creando el origen de la Ciudad actual.
Las Palmas era pequeña, con las casas muy antiguas, y lo moderno era francamente feo arquitectonicamente hablando. Los barrios habian crecido con una tipologia de vivienda horrible. Local comercial en planta baja y vivienda en primera planta.
Es en este momento que constato que mi padre se dedicaba a traer piedras que una de ellas era igual a la que yo habia encontrado en mi jardin, en Rio de Janeiro hacia muchos años.
La Amatista, que es un cuarzo que los Romanos ya la conocian como piedra protectora del riñon y el higado, por lo que le llamaban la piedra de los ebrios
Al desembarcar y hacer el recorrido desde el muelle a la calle Triana, por todo Leon y Castillo, se me vino el mundo encima. Venia de una gran ciudad, que el los ultimos diez años de mi estancia allí, habia sido modernizada de manera brutal, con el Governador Lacerda, cuando Rio perdió la capitalidad de Brasil por su traslado a Brasili, su gobierno acometió un sinfin de obras de infraestructuras, creando el origen de la Ciudad actual.
Las Palmas era pequeña, con las casas muy antiguas, y lo moderno era francamente feo arquitectonicamente hablando. Los barrios habian crecido con una tipologia de vivienda horrible. Local comercial en planta baja y vivienda en primera planta.
Es en este momento que constato que mi padre se dedicaba a traer piedras que una de ellas era igual a la que yo habia encontrado en mi jardin, en Rio de Janeiro hacia muchos años.
La Amatista, que es un cuarzo que los Romanos ya la conocian como piedra protectora del riñon y el higado, por lo que le llamaban la piedra de los ebrios
Creciendo en Rio

primera foto se ve la ventana del poron donde los niños del vecindario metian bombas de fiesta para asustar a los nuevos "gallegos" puestos que todos los españoles eran gallegos para el brasileño de baja cultura. La otra foto es el segundo barrio donde viví, Meyer, tendría aquí 16 años, faltaba un año y medio para marcharme de vuelta a Las Palmas.
En la primera foto se aprecia la hierba que crecía en la calle y servia de pasto para los caballos que dejaban sueltos por las tardes, los propietarios de carrozas que distribuyen leche, hielo y frutas que vendían por las calles del barrio.
En Meyer, el segundo barrio, era de clase media, mucho mejor organizado y tenia todas sus calle asfaltadas como se puede apreciar en la foto con mi hermana Victoria, mi padre y mi hermano Sebastian.
El viaje
Ordenando los recuerdos
sábado, 14 de febrero de 2009
El salto en el tiempo


Desde los 15 años hasta que encuentro en Flandes un relicario del craneo que dicen pertenecer a Juan Bautista, para el Orden del Temple era un ser superior a Jesus, por ser el quien bautizo al hijo de Dios. Estas putualizaciones no son mias, sino que las hé leido en libros sobre Los Templarios. El espacio de tiempo, entre los 15 años y los 50, es demasiado largo para no hablar sobre el.
La talla que habia hecho aquel domingo, me la llevo para casa, mis padres se marchan de Rio de Janeiro con mi hermana Victoria, la pequeña y con Regina mayor que yo.
Me quedo para ayudar en la tienda de zapatos que se llamaba Suzuky en Leblon, por que mis hermanos y mi otra hermana Rosa se quedan para seguir estudiando sus carreras, me cambio el turno de estudios, del curso de mañana me paso al turno de noche, turno que me frena en seco mis estudios, puesto que era de personas trabajadoras y estaban un año retrasado en relación con el de la mañana, por lo que hago un curso repetido para mi y al terminar en Noviembre yo ya estoy preparado para mi retorno a Las Palmas.
Mi vuelta la hago en un barco ingles que iba a cambiar la ruta, pasaba a una armadora africana y se terminaba sus viajes a sud america se llamaba "Amazon".El viaje duro 7 dias, al septimo dia al amanecer divisabam las luces de Las Palmas, para mi era una ciudad extraña, ya se me habian borrado de la memoria sus calles sus casas, solo un vago recuerdo persistia, la casa en Tafira y una casa en que vivi mis ultimos meses en esta ciudad, donde habia otro niño, frente a una de las ventanas de la casa, al cual le contaba que allí en mi cuarto habian muchos juguetes en las estanterias y que era muy grande, era producto de mi enorme fantasía, pero al cabo de los años compré en la misma calle una casa vieja para poner la tienda de minerales y estaba llena de estanterias como en mis cuentos infantiles.
Otro elemento que hiso una fuerte presencia en mi vida, fue un libro titulado Las Maravillas del Universo. Este libro está dedicado a las grandes obras que han realizado la Humanidad. La Halambra, las Murallas de china, las Piramides, Ponpeya, entre todos los apartados que contenia el libro me inprecionaban mucho los Egipcios y Ponpeya, aunque tambien me paseaba entre las fotos por La Halambra, los Castillos y la muralla de China.
Una foto, la representación de Horus en una estela hecha de granito gris, con la serpiente simbolizando la Tierra, Horus representado pur un cernicalo era la representación del aire. Esta pieza se encuentra en el Museo Parisino de El Louvre. Hace unos 5 años la conseguí contemplar, aunque reconosco que no fué fácil encontrarla, está en las plantas sotano en un area donde se exponian restos Egipcios bastante caotica, y derrepente la encuentro apoyada en el suelo contra otra pieza sin ningun destaque, aunque en el Catalogo del Museo aparece como pieza para contemplar de manera preferente, talvez por su factoria de gran belleza y precisión.
Antes de visitar el Museo del Louvre, yo habia reproducido en una plancha de madera la placa donde talle a Horus y a la serpiente. Todas estas fotos las subiré en los próximos dias, puesto que todos estos elementos siguen estando con migo.
La talla que habia hecho aquel domingo, me la llevo para casa, mis padres se marchan de Rio de Janeiro con mi hermana Victoria, la pequeña y con Regina mayor que yo.
Me quedo para ayudar en la tienda de zapatos que se llamaba Suzuky en Leblon, por que mis hermanos y mi otra hermana Rosa se quedan para seguir estudiando sus carreras, me cambio el turno de estudios, del curso de mañana me paso al turno de noche, turno que me frena en seco mis estudios, puesto que era de personas trabajadoras y estaban un año retrasado en relación con el de la mañana, por lo que hago un curso repetido para mi y al terminar en Noviembre yo ya estoy preparado para mi retorno a Las Palmas.
Mi vuelta la hago en un barco ingles que iba a cambiar la ruta, pasaba a una armadora africana y se terminaba sus viajes a sud america se llamaba "Amazon".El viaje duro 7 dias, al septimo dia al amanecer divisabam las luces de Las Palmas, para mi era una ciudad extraña, ya se me habian borrado de la memoria sus calles sus casas, solo un vago recuerdo persistia, la casa en Tafira y una casa en que vivi mis ultimos meses en esta ciudad, donde habia otro niño, frente a una de las ventanas de la casa, al cual le contaba que allí en mi cuarto habian muchos juguetes en las estanterias y que era muy grande, era producto de mi enorme fantasía, pero al cabo de los años compré en la misma calle una casa vieja para poner la tienda de minerales y estaba llena de estanterias como en mis cuentos infantiles.
Otro elemento que hiso una fuerte presencia en mi vida, fue un libro titulado Las Maravillas del Universo. Este libro está dedicado a las grandes obras que han realizado la Humanidad. La Halambra, las Murallas de china, las Piramides, Ponpeya, entre todos los apartados que contenia el libro me inprecionaban mucho los Egipcios y Ponpeya, aunque tambien me paseaba entre las fotos por La Halambra, los Castillos y la muralla de China.
Una foto, la representación de Horus en una estela hecha de granito gris, con la serpiente simbolizando la Tierra, Horus representado pur un cernicalo era la representación del aire. Esta pieza se encuentra en el Museo Parisino de El Louvre. Hace unos 5 años la conseguí contemplar, aunque reconosco que no fué fácil encontrarla, está en las plantas sotano en un area donde se exponian restos Egipcios bastante caotica, y derrepente la encuentro apoyada en el suelo contra otra pieza sin ningun destaque, aunque en el Catalogo del Museo aparece como pieza para contemplar de manera preferente, talvez por su factoria de gran belleza y precisión.
Antes de visitar el Museo del Louvre, yo habia reproducido en una plancha de madera la placa donde talle a Horus y a la serpiente. Todas estas fotos las subiré en los próximos dias, puesto que todos estos elementos siguen estando con migo.
jueves, 12 de febrero de 2009
Una nueva señal
Con el paso del tiempo, los hechos se superponen en la memoria, pero acontece un cambio fundamental en mi vida, cambiamos de barrio y me alejo de los amigos y principalmente de Jose Carlos. Vuelvo algunas veces mas al barrio, hasta que ya me alejo definitivamente, mientras tanto mi padre también cambia de local para su fabrica de zapatos de mujer.La última ubicación fué en el barrio de Pilares, nombre que provenia de los pilones de agua que existian en la plaza de la Iglesia. Allí en la fabrica los Domingos, nos reuniamos los hermanos para organizar el trabajo del dia siguiente y despues nos hibamos a misa a la iglesia de nuestro barrio, Meyer.Un domingo cualquiera, no habia mucho que hacer y todos buscamos algo, solo me acuerdo lo que hizo mi hermano Manuel, un dibujo sobre un trozo de cuero para suelas, algo que recriminó su padre, por gastar material del trabajo. Yo me dedique a tallar un trozo de madera, salió una cara o esfinge. Esta figura sigue conmigo, es la que tengo en la pagina. Esta figura se relaciona con posteriores acontecimientos y se interrelacionan con otras figuras que tienen que ver con todo el proceso de acercamiento a la materia.
En este momento de mi vida los hechos se precipitan, mi padre que estaba enfermo del corazon lo operó el Doctor Zerbine en la Beneficencia Portuguesa en Sao Paulo, se recuperó y como los negocios no iban bien desde el golpe de estado que habia derrocado el Presidente de la Republica Joao Gular que habia accedido al poder por la renuncia de Janio Cuadros, aquel presidente que ganó las elecciones con el eslogan de la escoba, para barrer la corrupción en Brasil.
Mientras tanto, mi padre conoce a un Sr. que se dedicaba a llevar a Las Palmas productos que se podian vender a los turistas que empezaban a llegar a las Islas. Fué en estos momentos cuando entro en contacto con las piedras naturales, cuarzos entre otros, y me recuerdo de mi primer descubrimiento cuando niño, tenia en mis manos un cuarzo amatista, ¿que hacia una punta de cuarzo amatista en Aboliçao?
tres objetos
En Flandes 40 años despues, encuentro en una pequeña iglesia Belga una talle que contiene una reliquia. Dicen ser un trozo del craneo de Juan Bautista, al que le cortaron la cabeza.
El relicario tiene un mango para elevar la cabeza en el aire y dominar las fuerzas.

La talla con 15 años, es la primera señal del cambio del futuro
El relicario tiene un mango para elevar la cabeza en el aire y dominar las fuerzas.

miércoles, 11 de febrero de 2009
El "quintal"
Ya tenemos la ubicación correcta, estamos en el quintal, era en desnivel con arboles frutales, a su lado discurria un rio que mas bien era una tuberia de desugüe de todo aquel barrio, a el iban a para muchas de las aguas sucias dela zona. Tenia unos pequeños peces que vivian en los remanzos del rio, y habian altas plataneras que le daba un aspecto mas elegante a tanta podredumbre. Tengo que decir que a causa de entrar muchas veces a ese rio de dió un paratifus, así se lo dijeron los sanitarios que vinieron a analisarme por si hubiera un brote de tifus en el barrio. Aquel jardin era el escenario de todos mis juegos, fuí vaquero, indio, romano, tarzan, constructor y enterrador, así es, enterrador porque desde que supe que una parte mia estaba enterrada en el jardin, debajo de una gran piedra, a su alrrededor enterré todos los anilales que me aparecian muerto en el quintal, pajaros, gatos, ratones y un pato que tuve durante bastante tiempo hasta que murió envenenado, me dijeron. Era un pato blanco, mejor una pata por que ponia un huevo todos los dias mientras vivió. Llegó a mi vida de la manera mas estraña; estaba mi amigo y yo tumbados en el suelo de la calle mirando al cielo y hablando del próximo juego al que nos gustaria jugar cuando Jose Carlos dijo.
-Mira! un urubú blanco! a lo que le conteste.
-No puede ser, los urubús son negros.
Los urubus son aves carroñeras que se dedican a limpiar el territorio de cadaveres de animales que aparecian muertos en el rio que discurria por el barrio y pasaba al lado de mi quintal, donde crecian plataneras y una hierba que sus hojas eran como sierras.
Aquella ave se poso en la otra esquina de la calle donde fuimos corriendo para saber que era, al llegar cerca el pato blanco vino hacia mí se me puso debajo, yo solo tuve que cojerlo y llevarmelo a mi jardin, allí permaneció hasta su muerte.
Cuando tenia 12 años aproximadamente, se me ocurrió reproducir un monte que habia en el barrio con sus casitas y sus masas de piedra, se llamaba Monte del Urubú.
La construcción de este Monte, aunque fuera a escala reducida tenia que mover mucha cantidad de tierra y piedras, fué entonces que me ocurrió algo que me há marcado toda mi vida.
El hallasgo de una estraña piedra, para mi conociminto del momento, jamas la habia visto igual, era con forma de prisma por una punta y por la otra parecia haber sido hecha por alguien que tuviera herramientas en forma de formon, para sacarle lascas como a la madera´
Esta piedra me inpactó, la mantuve conmigo hasta que se me extravió en mi viaje de regreso a Las Palmas
-Mira! un urubú blanco! a lo que le conteste.
-No puede ser, los urubús son negros.
Los urubus son aves carroñeras que se dedican a limpiar el territorio de cadaveres de animales que aparecian muertos en el rio que discurria por el barrio y pasaba al lado de mi quintal, donde crecian plataneras y una hierba que sus hojas eran como sierras.
Aquella ave se poso en la otra esquina de la calle donde fuimos corriendo para saber que era, al llegar cerca el pato blanco vino hacia mí se me puso debajo, yo solo tuve que cojerlo y llevarmelo a mi jardin, allí permaneció hasta su muerte.
Cuando tenia 12 años aproximadamente, se me ocurrió reproducir un monte que habia en el barrio con sus casitas y sus masas de piedra, se llamaba Monte del Urubú.
La construcción de este Monte, aunque fuera a escala reducida tenia que mover mucha cantidad de tierra y piedras, fué entonces que me ocurrió algo que me há marcado toda mi vida.
El hallasgo de una estraña piedra, para mi conociminto del momento, jamas la habia visto igual, era con forma de prisma por una punta y por la otra parecia haber sido hecha por alguien que tuviera herramientas en forma de formon, para sacarle lascas como a la madera´
Esta piedra me inpactó, la mantuve conmigo hasta que se me extravió en mi viaje de regreso a Las Palmas
martes, 10 de febrero de 2009
El principio
Las Palmas, hace bastante tiempo nací en esta ciudad que tiene un poco mas de 5 siglos... fue corta mi estancia en ella al principio de mi vida, solo 7 años...
Rio de Janeiro, llegue a esa ciuadad cuando todavia la basura se recogia en carromatos tirados por burros...comparada con Las Palmas, era inmensa, sus avenidas interminables, pero me llevaron a vivir a un barrio de clase media baja, Aboliçao, nombre que proviene de la abolición de la esclavitud en Brasila allá por l700 y algo, creo recordar. Para esta historia real no tiene ninguna significación las fechas pero si los lugares.
Me gustaria poder transmitir las emociones que sentí, siendo un niño, que llegaba por primera vez al barrio, sobre un camion con mi familia y nuestras pocas pertenencias. La calle Basilio da Gama, talvez pariente de Vasco da Gama, celebre marino Portugues, era sin adoquines, solo tenia el bordillo de la acera en piedra viva para sujetar el nivel superior de la acera. Los caballos que arrastraban los bidones de leche que se vendia por la mañana, descansaban, comiendo hierba que crecia en la calle por la tarde, cuando no los cojian los muchachos para hacer carreras allí mismo, en la calle.
A la casa que fuimos a vivir era de techos altos y altas ventanas, el suelo era de madera cruda de largos tablones y estaba suspendida un metro del nivel de la calle, donde se abrian pequeños ventanucos que algun gamberro tiraba petardos que les llamaban "cabeza de nego" para asustar a los nuevos "gallegos".
El jardin, este es el lugar principal de esta Historia Real, el Jardin de la casa que se le llamaba "quintal". Tenia un leve desnivel y en el habia un barracon donde mi padre instaló una maquina para hacer cuerda, era una maquina infernal, hacia un ruido infernal a causa de que los hobillos de hilo que hacian un recorrido en forma de ocho, chocaban en el encuentro, al ser de hierro era un ruido atroz. El quintal tenia algunos arboles frutales que nos daban mangas aguacates nisperos, jacas y otros le llamabamos el arbol del algodon, puesto que daban unos frutos que al secarse se abrian y desprendian hilos de algodon que el viento se encargaba de desiminar por todo lugar.
Allí descubrí que mi hermano habia enterrado el dedo central de mi mano izquierda, que lo habia arrancado una maquina de la fabrica de zapatos de mi padre, pero eso es irrelevante para la Historia Real.
El Quintal o Jardin, como quieran llamarlo despertaba en mi un mundo de fantasias, era escenario de mis juegos mas dispares con mi amigo, mi primer amigo de Rio.
Rio de Janeiro, llegue a esa ciuadad cuando todavia la basura se recogia en carromatos tirados por burros...comparada con Las Palmas, era inmensa, sus avenidas interminables, pero me llevaron a vivir a un barrio de clase media baja, Aboliçao, nombre que proviene de la abolición de la esclavitud en Brasila allá por l700 y algo, creo recordar. Para esta historia real no tiene ninguna significación las fechas pero si los lugares.
Me gustaria poder transmitir las emociones que sentí, siendo un niño, que llegaba por primera vez al barrio, sobre un camion con mi familia y nuestras pocas pertenencias. La calle Basilio da Gama, talvez pariente de Vasco da Gama, celebre marino Portugues, era sin adoquines, solo tenia el bordillo de la acera en piedra viva para sujetar el nivel superior de la acera. Los caballos que arrastraban los bidones de leche que se vendia por la mañana, descansaban, comiendo hierba que crecia en la calle por la tarde, cuando no los cojian los muchachos para hacer carreras allí mismo, en la calle.
A la casa que fuimos a vivir era de techos altos y altas ventanas, el suelo era de madera cruda de largos tablones y estaba suspendida un metro del nivel de la calle, donde se abrian pequeños ventanucos que algun gamberro tiraba petardos que les llamaban "cabeza de nego" para asustar a los nuevos "gallegos".
El jardin, este es el lugar principal de esta Historia Real, el Jardin de la casa que se le llamaba "quintal". Tenia un leve desnivel y en el habia un barracon donde mi padre instaló una maquina para hacer cuerda, era una maquina infernal, hacia un ruido infernal a causa de que los hobillos de hilo que hacian un recorrido en forma de ocho, chocaban en el encuentro, al ser de hierro era un ruido atroz. El quintal tenia algunos arboles frutales que nos daban mangas aguacates nisperos, jacas y otros le llamabamos el arbol del algodon, puesto que daban unos frutos que al secarse se abrian y desprendian hilos de algodon que el viento se encargaba de desiminar por todo lugar.
Allí descubrí que mi hermano habia enterrado el dedo central de mi mano izquierda, que lo habia arrancado una maquina de la fabrica de zapatos de mi padre, pero eso es irrelevante para la Historia Real.
El Quintal o Jardin, como quieran llamarlo despertaba en mi un mundo de fantasias, era escenario de mis juegos mas dispares con mi amigo, mi primer amigo de Rio.
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